Los tratamientos de blanqueamiento dental son una forma eficaz de iluminar su sonrisa y mejorar su aspecto general. Sin embargo, un efecto secundario común que muchas personas experimentan después del blanqueamiento dental es la sensibilidad. Estas molestias temporales pueden ir de leves a graves, por lo que es importante conocer las causas y encontrar soluciones adecuadas para aliviar la sensibilidad. En este artículo, exploraremos las diversas causas de la sensibilidad tras el blanqueamiento dental y le ofreceremos posibles soluciones para minimizar su impacto en su vida diaria.
Causas de la sensibilidad tras el blanqueamiento dental
Cuando se somete a tratamientos de blanqueamiento dental, los agentes blanqueadores a base de peróxido utilizados tienden a penetrar en el esmalte y alcanzar la capa de dentina de los dientes. La dentina contiene tubos huecos microscópicos que conducen a las terminaciones nerviosas internas del diente. Cuando estos tubos se exponen a diversos estímulos, como cambios de temperatura o presión, puede producirse sensibilidad. Las causas más comunes de la sensibilidad después del blanqueamiento dental incluyen:
1. Adelgazamiento del esmalte
En ocasiones, los procedimientos de blanqueamiento dental pueden provocar un adelgazamiento temporal del esmalte. El gel de peróxido de los productos blanqueadores puede penetrar en el esmalte y alterar su estructura mineral, lo que provoca una sensibilidad temporal. Suele remitir a los pocos días, a medida que el esmalte se remineraliza.
2. Irritación de las encías
Las cubetas de blanqueamiento mal ajustadas o la aplicación excesiva de gel blanqueador pueden provocar irritación de las encías. Cuando el gel entra en contacto con los tejidos blandos de las encías, puede provocar inflamación y sensibilidad. Garantizar una aplicación adecuada y utilizar bandejas a medida puede reducir significativamente este riesgo.
3. Dentina expuesta
Los procedimientos de blanqueamiento dental pueden exponer la dentina y sus tubos huecos, lo que provoca sensibilidad. Esto puede ocurrir si el agente blanqueador se deja actuar durante demasiado tiempo o si se utiliza una mayor concentración de peróxido. Es importante seguir las instrucciones proporcionadas y consultar con su dentista para evitar la sobreexposición al agente blanqueador.
Soluciones para la sensibilidad tras el blanqueamiento dental
Si experimenta sensibilidad tras un blanqueamiento dental, puede tomar varias medidas para aliviar las molestias y tratar la sensibilidad de forma eficaz. Estas soluciones incluyen:
1. Usar dentífrico para dientes sensibles
Incorporar a tu rutina de cuidado bucal un dentífrico específicamente diseñado para dientes sensibles puede ayudarte a aliviar la sensibilidad. Estos dentífricos suelen contener ingredientes como nitrato potásico o cloruro de estroncio, que pueden ayudar a desensibilizar las terminaciones nerviosas de los dientes.
2. Evite los alimentos/bebidas extremadamente fríos o calientes
Durante el periodo de sensibilidad, es aconsejable evitar consumir alimentos y bebidas excesivamente fríos o calientes. Los cambios extremos de temperatura pueden desencadenar sensibilidad y mayores molestias. En su lugar, opta por opciones tibias o a temperatura ambiente.
3. Practica técnicas de cepillado suaves
Utilizar un cepillo de dientes de cerdas suaves y mantener técnicas de cepillado suaves puede minimizar la irritación de dientes y encías. Evite utilizar una fuerza excesiva o un cepillado agresivo que pueda empeorar la sensibilidad.
4. Tómese descansos entre tratamientos de blanqueamiento
Si se somete con frecuencia a tratamientos de blanqueamiento dental en casa, puede ser beneficioso hacer descansos entre cada sesión. De este modo, los dientes tienen tiempo para recuperarse y se reduce el riesgo de sobreexposición a los agentes blanqueadores.
Conclusión
La sensibilidad después del blanqueamiento dental es un problema común que experimentan muchas personas. Comprender las causas de la sensibilidad y aplicar las soluciones adecuadas puede ayudar a aliviar las molestias y garantizar una experiencia de blanqueamiento positiva en general. No olvide consultar a su dentista para obtener consejos y recomendaciones personalizados basados en su situación específica. Con el cuidado y la atención adecuados, puede conseguir una sonrisa más blanca y brillante sin sensibilidad duradera.